Los demás candidatos tuvieron meses para preparar sus documentos de nominación. Él tenía dos semanas. Los otros candidatos pasaron por un proceso de selección prolongado similar al de la Diócesis de la Florida Central en su reciente búsqueda y elección de obispos. Él era un candidato solicitado cuya candidatura se hizo oficial solo después de una revisión al final del período de catorce días para agregar nombres adicionales a la lista. No obstante, como 1 de 5 candidatos que buscan ser elegidos el 30 de septiembre como el décimo obispo de la Diócesis Episcopal del Sur de Ohio, el Rvdo. Dr. José Rodríguez no ve obstáculos, sino a Dios obrando.
“Estaba de vacaciones con mi familia y recibí una llamada de sacerdotes que nunca antes había conocido, preguntándome si consideraría en oración conocerlos y responder a algunas preguntas sobre la posibilidad de ser su candidato solicitado para la Diócesis del sur de Ohio”, explicó. Ahora, con 43 años, en caso de ser elegido, será uno de los obispos más jóvenes de la Iglesia Episcopal.
“Siempre he trabajado estrechamente con el clero aquí en Florida”, dijo Rodríguez, rector de Cristo Rey y vicario de Jesús de Nazaret, ambas en Orlando. “Y existe una diferencia entre trabajar con amigos y colegas y que perfectos desconocidos se te acerquen, diciéndote: ‘Vemos algo que nos gustaría considerar’.
“Personalmente creo que la vida es demasiado caótica y el mundo está muy caótico como para que las cosas se junten como sucedió en este proceso”, añadió. “Entonces, cuando veo orden en el caos, cuando veo diferentes lugares uniéndose, cuando veo un grupo tan ampliamente representativo como la gente del sur de Ohio, que representa alrededor de 15 de 71 iglesias, acercándose a mí con el mismo mensaje, que ellos quieren que sea su candidato, es casi imposible no escuchar la voz del Espíritu Santo en todo esto.
“Al principio, lo estaba postergando”, confesó Rodríguez. “Y luego escuché muy claramente la voz de Dios a través de ellos, que esto era algo a lo que había que prestar atención. Y al prestar atención, escuchar y aprender, escuché el llamado de Dios a ofrecerme como candidato. Y luego comencé a tener mis propias visiones y sueños de ser su obispo. Entonces, veremos qué dice la Convención [de Elección Especial]”.
A su vez, el Rvmo. Dr. Justin S. Holcomb, obispo de la Diócesis de la Florida Central comentó: “He estado trabajando con el Padre José durante este proceso desde que me lo dijo por primera vez, y he estado orando regularmente por y con él, por su familia y por la Diócesis del Sur de Ohio mientras disciernen sobre su próximo pastor principal”.
Rodríguez señaló que sus oraciones y su enfoque están tanto en la oportunidad en el sur de Ohio como en las dos iglesias a las que sirve en la Florida Central. “Esto no es algo que buscaba”, dijo. “Ni siquiera sabía que tenían un puesto de obispo vacante. Así que es algo que me llegó, algo que realmente ha sido por la gracia del Espíritu Santo, porque todo ese tiempo de oración que hubo en esas dos semanas [entre recibir la llamada telefónica y enviar la solicitud] fue uno de los más intensos en mi vida”.
Aunque su primera visita oficial a la Diócesis del sur de Ohio tendrá lugar este mes, cuando él y los demás candidatos participarán en sesiones de bienvenida, cree que su trabajo en la Florida Central lo ha preparado para su potencial episcopado. “La Florida Central es una porción de Estados Unidos”, describió. “Servir aquí me ha dado suficiente experiencia como para poder encontrar paralelos, intersecciones y conexiones con el sur de Ohio”.
Además, “los obispos están llamados a ser obispos de toda la iglesia”, añadió Rodríguez, quien nació en Puerto Rico, pero creció en la Florida Central. “Esto es así, ya que como latino, como puertorriqueño, mi primera experiencia fue en las comunidades anglo y con angloparlantes. No hubo una conexión entre ser latino y automáticamente entrar a ministerios hispanos. Fui a donde el Espíritu Santo me llamó a servir.
“Lo que me ofrece el sur de Ohio es una oportunidad para ministrar a toda la iglesia”, enfatizó. “Si bien me encanta ser parte de los ministerios hispanos aquí en la Florida Central, muchos de mis colegas me ven como el tipo de Ministerios Hispanos y se olvidan que también sirvo en una congregación anglosajona y que también dirigí el ministerio universitario. No recuerdan que también estoy en un matrimonio multicultural. Y aquí, en la Florida Central, donde los ministerios en los que sirvo están prosperando, aún me veo arrinconado. Así que, para que la gente del sur de Ohio se fijara en mí y me considerara, realmente me sentí como Agar: ‘el Dios que me ve’.
“Fue una profunda afirmación de mi llamado al sacerdocio que personas en una región muy diferente a ésta vieran mi capacidad y los dones que el Señor me ha dado para servir a todo el pueblo de Dios, no solo a las áreas hispanas de la Florida Central”, añadió Rodríguez.
Independientemente del resultado de las elecciones, él ve un valor en su nominación que trasciende más allá de él y su familia. “Espero que mi llamado desafíe a muchos de mis colegas a ver que están llamados a ser sacerdotes y ministros del pueblo de Dios que es diferente a ellos. […] Tenemos que reconocer que la Florida Central es una mayoría de minorías, y la demografía de nuestro clero no refleja la demografía de nuestra comunidad. Lo que espero es que el Espíritu Santo impulse al clero a alcanzar la creciente población demográfica de la Florida Central”.
Y Rodríguez tiene una visión para sus colegas actuales que también va más allá de la diócesis. “No soy el único sacerdote en la Florida Central que puede responder a este llamado”, dijo. “Y mi visión para nuestra diócesis es que muchos de nosotros respondamos a este llamado en todo el país. […] Espero que esto lleve a una reacción en cadena donde nuestros sacerdotes se ofrezcan al servicio en toda la Iglesia Episcopal.
“Tengo una visión; tengo el sueño de servir junto a muchos de mis colegas durante mucho tiempo”, enfatizó. “Y si me llaman a estar en la Cámara de Obispos, espero que ellos vayan conmigo a la Cámara de Obispos en todo el país.
“Nací en lo que entonces era la Provincia IX”, continuó Rodríguez. “Aunque nací ciudadano estadounidense, que el sur de Ohio considere a una persona nacida en el extranjero como su obispo en una de las diócesis nacionales, eso es significativo. Y deberían sentirse honrados por ello, me convierta o no en su obispo”.